One World Under Doom: The Devil We Know (Parte 3)
Tercera parte del evento en donde Doom se declara amo y señor del mundo.
En el final del número anterior unos Avengers de capa caída sumaban a sus filas a un grupo de villanos descontentos con el nuevo orden mundial que tiene a Doom como líder supremo.
Está nueva entrega arranca justo desde ahí, con los villanos (M.O.D.O.K, Mysterio, Arcade, Baron Mordo, Madelyne Pryor y el Doctor Octopus) interactuando con el grupo de héroes, Captain Marvel, líder de los Avengers, suma al heterogéneo sexteto cómo elemento impredecible para sorprender en un ataque directo al buen Víctor que espera pacientemente el próximo movimiento de los héroes.
Eso sería la mitad del plan (no se quemó mucho el coco Carol, la verdad) la otra es mandar a los usuarios de magia encabezados por Scarlet Witch para averiguar qué clase de control mental tienen los líderes mundiales para ceder tan fácilmente a las demandas de Doom, cortar ese control y sacarle apoyo, control y legitimidad.
PERDIENDO IMPULSO
Se veía venir pero no lo quería admitir, la historia empieza a ponerse algo reiterativa, con Doom siempre anticipándose a todo. Da la sensación que no importa lo que hagan los Avengers, los FF o villanos enojados, nada perturba al nuevo hechicero supremo, hay que ver cómo termina el ataque en su contra nomás para que uno se pregunte si no se le fue de las manos el power-up que obtuvo.
Doom puede gritar “Tengo al guión de mí lado” seguido de una risa maléfica y bien podría ir acorde a lo que se viene contando visto como se viene desarrollando todo.
Para colmo en este número no tenemos alguna interacción que nos saque alguna sonrisa, Wanda diciéndole gran nerd a Mysterio no alcanza.
La batalla contra Víctor termina de un modo tan abrupto que hizo que me encogiera de hombros y en un suspiro se me escapara un “ Ya está?… Y buee”.
UNA DE CAL Y OTRA DE ARENA (Latveriana)
En la parte buena tenemos el cómo la opinión pública internacional va cobrando más fuerza en favor de Doom, la revelación que hace el grupo dirigido por Wanda dice bastante del mundo en que vivimos, la potente y breve aparición de Dormammu al final que promete un enfrentamiento directo con el Emperador Doom, quien al parecer ha descuidado sus labores como hechicero supremo.
Ryan North comenzó a toda velocidad está historia, era obvio que en algún momento se iba a comer alguna curva, pero ojo que no se estrelló tampoco, todavía quedan 6 números para ver cómo se desarrolla el mandato del Regente de Latveria.
R.B. Silva sigue al mando del arte y eso siempre es motivo para festejar, multitud de personajes hablando, lanzando piñas o rayos, todo se le da bien y se entiende perfecto. Las expresiones faciales (de las que me queje en reseñas anteriores) están mucho mejor y se agradece.
David Curiel sigue haciendo magia con los colores, solo hay que ver esa última página para darse cuenta de lo importante que es su aporte en esta historia.
*Momento Doom: Se descubre que no hay ningún tipo de control mental o Doombots suplantando identidades, los líderes mundiales le han cedido el poder a Doom porque de verdad creen que el tipo puede arreglar un mundo y un sistema que están rotos, aún más después de la invasión de vampiros que lo coronó como hechicero supremo. Toma pa’ vo’.
Plus: Vuelve a aparecer en todo su esplendor el Doom T-Rex.
En el próximo número se viene Doom vs Dormammu… ¿Terminaremos gritando “Salí de ahí maravilla!!!”?