“Angela Della Morte” Edición Absoluta de Salvador Sanz
“Angela Della Morte” ha sido publicada en varios sellos. La Bastión, Fierro, Fire 5 comics, e incluso la misma Ovnipress fueron casa del título hasta que por fin en 2024 llega una edición que recopila todo el material en una edición absoluta, como lo aclara en la portada. Veamos de qué trata la obra y qué más podemos agregar sobre los temas e influencias del autor.
Entre la metafísica y la ciencia ficción
Al descubrir que el alma puede separarse del cuerpo y habitar otros, todo cambia para peor. Y eso no es lo más interesante que nos da Angela Della Morte.
Hay un limbo en el que respira el universo de Salvador Sanz. Algo que se encuentra entre Lovecraft, Giger y Barlow de un lado, y en el otro una amalgama siempre efectiva de acción, cyberpunk y terror. Angela della Morte es el ejemplo perfecto de esto mismo. Como ese recital en el que disfrutaste de los temas que más te gustan, originalmente de distintos discos, pero ahora juntos y sonando mejor que nunca, ADM (perdón, pero lo voy a abreviar así) nos ofrece algo a todo el que le gustaba por alguna razón u otra, los trabajos previos de Sanz.
Nómadas de la carne
La obra que más me gusta de Salvador Sanz, y en la que se pone en relieve su pasado en la revista Catzole, es “Desfigurado” (editado hace no tanto por Black Cat studio) y las diferencias son muchas con ADM, pero también creo que hay puntos en común, sobre todo en ciertos tópicos de su ciencia ficción, habituales en el cyberpunk. Pero vamos a las historias.

Angela es una agente de laboratorios Sibelius, quienes descubrieron que pueden separar la consciencia del cuerpo y hacerla habitar nuevos cuerpos, vacíos y desechables. La empresa aprovecha esta “usurpación” física para misiones, en clave espionaje, contra su rival corporativo. Sanz deja acá la semilla sobre la cual va a desarrollar historias y temas. Y lo importante es eso, más que una estricta definición o reglas, el cómo se edifica sobre la premisa y se la indaga abriendo nuevas puertas.
La primera historia sirve para presentarnos la idea general pero, y ésto es algo que mantiene todo el libro, con una equilibrada carga de información y acción.
En el segundo arco, El Perezoso, Angela es parte de un grupo que tiene como misión acabar con Bruno Caballero, un agente que se pasó al bando contrario. Caballero es, para complicar más las cosas, alguien importante en el pasado de nuestra protagonista, alguien que la tienta y plantea una nueva idea, la de extirpar el mal del cuerpo, como si se tratase de un tumor.

¿Liberar o no a la bestia?
Para éste nuevo capítulo tenemos un giro importante en cuanto al setting. Ahora estamos en la superficie lunar, y Angela es acompañada por un mono. El nombre de éste es Cebra y se trata de un agente que ahora puede “ocupar” únicamente cuerpos animales. De inmediato la base lunar es atacada por el Gobierno Fluo, los rivales de Sibelius ¿Qué está haciendo ella allí? Eso tiene que ver con el final del arco anterior y la extracción de la sustancia que provoca el mal y el destino de ésto mismo.
El cambio drástico del contexto trae consigo nuevas escenas de acción como la de mechas peleando cuerpo a cuerpo o a los tiros, así que incluso hay mechas para el que sea de su agrado.

Lo mejor para el final
Es difícil adelantar mucho de la trama en éste punto, ya que podría adelantar mucho del progreso de Angela y creo que las sorpresas son parte de la experiencia “sagrada” del lector. Si puedo comentar que ahora toca indagar a quienes fueron los antagonistas hasta el momento, la familia Fluo. El tablero se re configura y Angela ocupa un rol fundamental en los objetivos del barón Fluo, y aparece el arma definitiva, por lo tanto ya no se andan con vueltas.
Y junto con ello, aparecen nuevos temas. O al menos se hace más fuerte la idea de la muerte como una enfermedad que debe ser curada y las formas que se encuentran para este propósito, por ejemplo, el abandono total del cuerpo biológico.
En éste tramo ya se define la base que nos acompaña desde el comienzo, y aunque peque de reiterativo, la idea de las entidades o corporaciones del cyberpunk están allí y todo el tiempo ejercen su poder sobre los personajes. Con el progreso de la historia uno pierde de vista cómo éstas moldean o tuercen la realidad de los personajes, que viven con naturalidad cosas sobrehumanas. Pero siempre hay algo más, sea un mundo en otro plano, o un depredador más grande. A eso no hay escapatoria.

Los diseños monstruosos ya son una marca en Sanz y deben (para mí casi innegable) tanto a Giger como a Barlow. Siempre lleva las cosas más allá y uno se pregunta, ya con una sensación de incomodidad, cómo funcionan estas creaciones, y juega mucho con esa incapacidad de procesarlo.
La edición
La edición, o mejor debería llamársela LA edición, porque Ovnipress ha hecho un trabajo inmejorable con ya uno de los mejores trabajos de Salva. En esta nueva edición no sólo se recopila los libros ya editados por Ovni, pero la gran diferencia la hace el color. El encargado es Gonzalo Duarte, que tiene la difícil tarea de convertir climas que aprovechaban lo monocromático para sus climas más herméticos u opresivos, y repensar todo, para ahora jugar más con la frialdad y calidez, sin perder la fuerza de la iluminación.
La edición supera las 240 páginas e incluye material extra como dibujos preliminares y portadas alternativas.
Influencias, recomendaciones y pensamientos finales
Aunque las influencias de Giger y Lovecraft son cosas obvias en muchas de sus obras, también vale mencionar a Philip Dick y sus idea de “otro” mundo, la paranoia y la influencia del cyberpunk, como también la de Wayne Douglas Barlow, un artista conceptual de criaturas que, sin apelar al shock, te deja fascinado y horrorizado por partes iguales.
Quienes se interesen por más obras del genial Sanz, hoy puden encontrar varias a disposición (y otras que deberían considerarse re editarlas). Insisto con “Desfigurado” que también es ciencia ficción y quizás más visceral. “Legión” y “El Esqueleto” son más del lado de terror y quizás menor escala, pero son relatos con peso en toda su regla. Hablando de escala, no puedo no mencionar “Mega”, su versión de Kaaijus, que cuenta con dos volúmenes y próximamente un tercero. Me gustaría recomendar “Nocturno” pero es la que quizás sea menos sencilla de conseguir y si llegase a re editar, se le podría revisar el trabajo de globos y rotulación. Y en un intento de compensar esta última falta, dejo el dato para los completistas: En “Ucrónicas”, antología de Mauro Mantella y editada por Rabdomantes, encontrarán una historia corta donde hace equipo con el guionista, que además inspira el arte de tapa. Y si no es suficiente, pueden salir a cazar una nueva versión de “El Color que Cayo del Cielo” donde se manda ilustraciones que no se podría ni empezar a describir, algo que va como anillo al dedo en el trabajo del escritor de Providence.
Si todo esto no es suficiente, aún se puede encontrar “Ultra Mal: El Arte de Salvador Sanz“, donde despliega lo mejor de su estilo y fortalezas.
Quienes se han interesado por éstos temas, pueden buscar “Possessor” una película de Brandon Cronenberg, hijo del padre del body horror David Cronenberg, al cual parece que Salvador se le adelantó en temas de posesiones de cuerpo y espionaje. Por el lado de las almas y la idea de su intercambio, recomiendo “Cold Souls”, también película pero de Sophie Barthes en éste caso. Y en cómic, por si ya no los mandé demasiado a buscar las otras obras de Sanz, recuerdo dos que tocan los mismo temas. “Come into Me” de Nadler y Thompson, donde se busca traspasar la consciencia a otro cuerpo momentáneamente, y “American Ronin” de Milligan y Aco, sobre un espía que debe meterse en la cabeza de sus objetivos para entenderlos mejor, borrando los límites de las identidades o perdiéndose en ellas.
Me despido hasta que una nueva obra de ciencia ficción provoque en mí la necesidad de escribir sobre ella y recomendarla a todo el que pueda. Más si es de Salvador Sanz.