“Guía básica para sobrevivir a explosiones” de Cristian Blasco e Ian Debiase
Cristian Blasco (Sofía, Faraday) e Ian Debiase (“¿Qué querés ser cuando seas grande?“, “Corazón Sputnik”) compusieron juntos “Guía básica para sobrevivir a explosiones”, que, luego de ganar el premio Estímulo a la escritura “Todos los tiempos el tiempo”, sale a la venta gracias a la editorial (del propio Blasco) Viajero del alba.
CABALLO DE TROYA
Primera escena: Cristian Blasco entra a la casa de su padre, por la fuerza, junto a un tío y un vecino. Huelen a gas. La casa explota. Ésta es la historia de cómo ocurrió, pero también la historia de Cristian y la de su padre. Ahora, si bien arranca con esa escena que inevitablemente te engancha, pasado ese punto logra mantenerte igual de interesado. Esto es porque, afortunadamente, “Guía…” es un poco un caballito de troya en el que te encontrás con más que lo que esperabas.
Por un lado, Blasco muestra quién y cómo es, un comiquero con el que compartimos ADN (entiéndase esto como la pasión por la cultura popular, comics, cine, etc.) y con eso la historia pasa a ser un poco nuestra también. Y es que probablemente nos unimos todos al compartir características con esos personajes que leemos, mitológicos e inmortales, como cualquier pibe que pueda llegar a ser mordido por una araña radioactiva. Así que tampoco es el azar cuando vemos reflejadas las relaciones de éstos con sus progenitores y, obviamente, los mandatos. En éste caso, Blasco nos invita a reconstruir su pasado y la relación con su padre. Éste trabajo es, a mi parecer, el más importante del libro y el que resignifica todo a la hora de volver al punto de partida.

Así como Spiegelman y Bechdel, Blasco emprendió el, imagino yo inconmensurable, ejercicio de retratar a su padre y los vaivenes de su relación. Y qué vaivenes. Gracias a ésto, que es el corazón del libro, vamos a tener momentos tanto entrañables como duros, pero honestos.
También conoceremos, aunque brevemente, al círculo familiar y de amigos que acompañaron a Blasco al momento de la internación y, debo decirlo, quizás el puntito flojo como historieta está en ese recogimiento de testimonios con personajes que posiblemente no vuelvan a aparecer y están para aportar su granito de arena en tan sólo ese momento. ¿Cómo mantener interesante la historieta en momentos así? Bueno…
EL ESTILO JUSTO
Si uno sigue mínimamente el trabajo de Ian Debiase se encontrará con obras de un autor comprometido. Tanto en sus trabajos de ilustración como “La vida se parece tan poco a nuestros sueños que festejamos cada vez que llega el fin de semana“, o “Corazón Sputnik“, o en historieta con “¿Qué querés ser cuando seas grande?” o “Historias de una revuelta“. En Guía… no va por el mismo palo que en Historias de una revuelta, pero ya que mencionamos ésta última, la podemos tomar en cuenta para comentar algunas de sus decisiones. Algo que parece traer de la serie de Fierro es una paleta de colores muy cálida y acorde para la historia. Y si bien el estilo es quizás un poco menos realista o cargado en cuanto los personajes, la sencillez en su diseño también los hace más cercanos. En cuanto a la expresión corporal, ahí sí hay una sintonía fina que, si te gusta en esas historietas costumbristas de Paco Roca, donde se intercala el drama con un humor simpático, compinche, lo vas a encontrar acá también.

SI NO FUE SUFICIENTE CON TODO ESTO…
No tengo muchas dudas de que, cuando llegue el momento, “Guía básica para sobrevivir a explosiones” sea considerado uno de los libros más destacados del año. No importa que sea una historia muy personal o los detalles puntuales, porque conectamos con la emoción en el corazón de la misma y el tema en general. Cómo una anécdota personal de un comiquero cordobés es el vehículo de una de las grandes historias que nos regala el medio este último tiempo. Leelo, que algo de vos vas a encontrar.